FALLECIÓ LA ABUELA MAGDALENA, OTRA VÍCTIMA DEL EXTERMINIO DE ABUELOS A MANOS DE UN GRUPO DE MÉDICOS Y DEL PAMI

La abuela Irma Magdalena Leguizamón, a quien le amputaron por error una pierna en el Nuevo Sanatorio Berazategui, finalmente falleció el martes último en el sanatorio ‘Güemes’ de CABA, tras haber caído -luego del ‘sanatorio del horror’- en otro sanatorio propiedad del mismo grupo dueño del ‘Nuevo Sanatorio…’, la Clínica ‘Ceni’ (ex San Ramón) de Quilmes.
La mujer, de 66 años, había sido internada en el Nuevo Sanatorio Berazategui víctima de un grave cuadro de diabetes que complicó su pierna derecha donde se observaba una preocupante gangrena, que motivó la órden de un cirujano vascular, Rico Núñez, que debía amputársele el miembro inferior, ya que «amenazaba seriamente la vida de la paciente». La intervención la practicó -supuestamente- el cirujano Gonzalo Cardozo.
Pero grande fue la sorpresa de la familia de la abuela, cuando la hija ingresó en la sala donde estaba internada su mamá, y al correr la sábana para observar la operación, descubrió que le habían cercenado la pierna izquierda, lo que hizo estallar en una crisis de nervios a la hija y derivó en una denuncia penal con intervención de la UFI 7 Descentralizada de Berazategui a cargo de la Dra Karina Santolín, quien ordenó el inmediato allanamiento del sanatorio.
La denuncia planteó que Magdalena Legui-zamón fue víctima de mala praxis, al sufrir la amputación de su pierna izquierda por equivocación. «Yo amputé la pierna que me dijo Rico», había declarado Cardozo, el traumatólogo que amputó a Magdalena, sin entenderse cómo un cirujano experimentado, pudo confundir una pierna infectada con una sana…
El otro imputado es Rafael Mariano Rico Núñez, el cirujano cardiovascular que firmó la derivación a quirófano.
Ambos están acusados e imputados inicialmente por «lesiones culposas», acusación que ahora cambió a «homicidio culposo», entre otros puntos del Código Penal.
CAYÓ EN OTRA CUEVA
Irma Magdalena Leguizamón, al ser sacada del Nuevo Sanatorio Berazategui, fue derivada de urgencia a la ex clínica ‘San Ramón’ de Quilmes, hoy con el ‘nuevo nombre’ de CENI, pero que pertenece al mismo holding de los dueños del Nuevo Sanatorio Berazategui, la Clínica Ranelagh, el Sanatorio Bernal y otros, y que -lamentablemente- serían lugares donde también atienden los mismos médicos del ‘Sanatorio del Horror’.
Magdalena terminó siendo atacada por un virus del CENI siendo derivada al Sanatorio Güemes de CABA, donde finalmente sufrió un paro cardiorespiratorio.
Ahora, es una mas de las víctimas fatales del grupo médico – empresario que, en sociedad con el PAMI, mantiene el monopolio de las ‘cápitas’ de esa obra social en la zona, que sigue facturando millones sin controles de ningún tipo, y que incluye que pese a que Berazategui tiene una Delegación del PAMI a escasas 10 cuadras del Nuevo Sanatorio Berazategui, nunca ‘descubrió’ la cantidad de muertes que cosecha el lugar.
Ya habría mas de 50 denuncias en las fiscalías de Berazategui. ¿Harán algo?