PARA ENFRENTAR A LA JUSTICIA POR EL FALLO ‘VIALIDAD’ EL KIRCHNERISMO PREPARA SU PROPIO ATAQUE
Frente a la inminencia del fallo condenatorio a Cristina Fernández de Kirchner y otros acusados por la causa ‘Vialidad’, el kirchne-rismo organiza -según fuentes confiables- una serie de ataques contra la Justicia.
Fuentes tribunalicias aseguran que el Tribunal Federal Oral N° 2 dictará el fallo de la causa Vialidad antes de que termine el Mundial de Qatar, para minimizar la reacción del kirchnerismo mientras la opinión pública está focalizada en el futbol.
Para los analistas, ello demostraría en los hechos que «la capacidad de los seguidores de Cristina Kirchner para conmover la realidad nacional es muy escasa».
Dentro mismo de ‘La Cámpora’ predominaría el criterio de que, una vez dictada la segura sentencia condenatoria, sólo quedaría el camino de la violencia social, con una movilización masiva para repudiar el fallo y pedir el juicio político de los miembros del tribunal. Una variante que se estudia -aseguran- es la de realizar movilizaciones simultáneas en las principales ciudades del país.
Pero el segundo problema que plantea esto -el primero es el Mundial- es que deberá tratarse de movilizaciones mayores a las ya realizadas después del alegato del fiscal Diego Luciani.
Otra vertiente del cristinismo, con base en el bloque de senadores del Frente de Todos, le plantearía a Cristina que «ponga el acento en la reacción institucional». Esto es, el inicio del trámite de pedido de juicio político ante el Consejo de la Magistratura a los jueces Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Andrés Basso. En otras palabras, privilegiar la ingeniería institucional a la pelea callejera.
Pero a su vez el principal problema que enfrenta la vicepresidenta, es cómo hacer para que la plana mayor del peronismo, es decir los gobernadores, se solidaricen con ella y den indirectamente su reconocimiento a su autoridad como jefa de todos los peronistas. Los mandatarios provinciales vienen eludiendo decir presente después del alegato de Luciani e incluso del atentado.
Diez de ellos se reunieron para plantearle a Alberto Fernández que requieren una explicación acerca de si el gobierno se jugará a suspender por ley las PASO, como ellos reclaman.
Pero el presidente Alberto Fernández no concurrió a esa cita por supuestos problemas de salud.
Así las cosas, el malestar en el peronismo del interior con Cristina y Alberto va in crescendo y en este contexto casi nadie -Jorge Capitanich es una excepción- quiere comprarse tamaño pleito con la justicia federal.
En síntesis, Cristina se las puede ver negras a la hora de intentar que el peronismo en su conjunto la respalde contra la sentencia.