Para el Financial Times, es injusto que un juez estadounidense decida el destino de Argentina
Increíblemente, parecería que el futuro económico y político de Argentina podría depender de una decisión que no se tomará en Buenos Aires, sino en un tribunal federal en Nueva York.
En una columna publicada por el Financial Times, el ex gestor de fondos Jay Newman cuestiona duramente el curso legal seguido por el caso Petersen vs. Argentina, cuyo fallo en primera instancia impone una condena de 16.000 millones de dólares al Estado argentino.
«En una vuelta irónica del destino, tres jueces estadounidenses tienen el destino de una nación en sus manos», escribió Newman, también ex gestor sénior del fondo Elliott Management. La decisión está ahora en manos de la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Estados Unidos, que deberá decidir si mantiene o revoca la sentencia dictada por un tribunal inferior.
El origen del litigio se remonta a la expropiación en 2012 de acciones de la petrolera YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales). Según el FT, la empresa, creada por ley argentina en 1922, es una corporación local que opera en territorio nacional, se rige por legislación argentina, explota recursos naturales argentinos y abastece de energía al país.
En ese contexto, el gobierno de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner decidió «nacionalizar» el control de la compañía.
De acuerdo con la columna, en aquel momento Repsol, la multinacional española que era el accionista mayoritario, fue acusada de priorizar «distribuciones a los accionistas en lugar de reinvertir capital para desarrollar la producción de petróleo y gas de la recién descubierta formación de Vaca Muerta».
En respuesta, el Ejecutivo argentino invocó su potestad de «política pública» para intervenir la compañía. Newman argumenta que «este tipo de actos no son inusuales y forman parte de la definición misma de soberanía».