PABLO OTERO, EL ‘REY DEL TABACO’ IMPUNE PESE A LA DENUNCIA DEL GOBIERNO
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA, ex AFIP), denunció al titular de la Tabacalera Sarandí, Pablo Otero, por «maniobras de legitimación de activos de origen ilícito» por más de $33.000 millones. El Gobierno apuntó al sistema empleado por Otero e identificó 23 «usinas de facturas truchas».
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero denunció a Otero, por presunto lavado de dinero.
La denuncia fue presentada ante la Justicia Federal para que se inicie una investigación por «maniobras de legitimación de activos de origen ilícito (lavado de dinero), conforme al artículo 303 del Código Penal».
En la denuncia, firmada por Felicitas Achábal en carácter de Jefa interina de la División Penal Tributaria de la Dirección de Operaciones Grandes Contribuyentes Nacionales de ARCA, se detalla que «Tabacalera Sarandí S.A. vendió cigarrillos por más de $33.600 millones entre los años 2021 y 2023 a 23 distribuidores mayoristas con perfil fiscal irregular y sin capacidad operativa real que revendían los productos a consumidores finales sin identificar y emitían facturas con precios similares a los de compra, lo que sugiere baja rentabilidad y posible simulación de actividad comercial»»»
Ante lo inusual de la operatoria de venta, se suma que los vendedores mayoristas poseen un marcado perfil fiscal irregular, y una notable falta de capacidad operativa, económica y financiera para llevar adelante el negocio», detalla la denuncia. La investigación oficial destaca también que estas empresas funcionaban como «usinas» para «blanquear dinero de origen ilícito mediante la incorporación de efectivo en el circuito financiero formal».
ARCA realizó tareas de investigación y fiscalización enfocadas «en analizar con profundidad la capacidad operativa, económica y/o financiera de cada uno de éstos distribuidores mayoristas, teniendo como objetivo principal verificar las operaciones facturadas y el circuito de pagos», dice un comunicado de la agencia estatal.
A través de esos relevamientos, el organismo decidió iniciar una investigación por «maniobras de legitimación de bienes u otros activos de origen ilícito».
Según la investigación y denuncia de ARCA, la operatoria entre Tabacalera Sarandí S.A. y los 23 distribuidores identificados, le permitió a Otero recibir fondos de operaciones de venta por un monto de $33.632 millones de 2021 a 2023 lo que «representa aproximadamente un 31% del total facturado en dichos periodos».
Según la denuncia, «los pagos por las ventas realizadas a TSSA a las distribuidoras, se realizaron mediante depósitos en efectivo a las cuentas recaudadoras de la vendedora. No se han aportado documentos ni información suficiente que justifique el origen de los fondos empleados por las distribuidoras para afrontar dichos pagos, lo que impide llevar una adecuada trazabilidad del dinero».
Finalmente, los fondos derivados de las ventas a distribuidoras catalogadas como «usinas sin capacidad operativa, económica y/o financiera» se incorporan al circuito financiero formal, como pagos en las cuentas bancarias de Tabacalera Sarandí y por ello es que se pone en conocimiento la maniobra observada.